A todos nos ha pasado: envías una factura y justo después te das cuenta de que algo no cuadra. Un número mal, un IVA equivocado o un cliente que cambia de datos a última hora.
No pasa nada, se puede arreglar. Pero cuidado: no se trata de borrar y volver a emitir.
Para eso existe la factura rectificativa.
Una factura rectificativa es un documento que se utiliza para corregir un error en una factura ya emitida.
Tiene la misma validez que una factura normal, pero su función es ajustar la información o los importes para dejar constancia de la corrección.
Puede parecer un simple reemplazo, pero no lo es. A nivel contable, Hacienda quiere ver el rastro de la corrección, no una factura “misteriosamente desaparecida”.
Por eso nunca se modifica la original: se emite una nueva que rectifica total o parcialmente la anterior.
Siempre que haya un error o modificación en una factura ya enviada, deberías emitir una rectificativa.
Los motivos más habituales son:
En todos esos casos, la solución es la misma: una factura rectificativa con los datos correctos y una referencia clara a la factura que sustituye.
Aparte de los elementos habituales (fecha, número, emisor, receptor, base imponible, IVA y total), la factura rectificativa debe contener tres detalles clave:
Estos tres datos son los que hacen que el documento tenga validez legal y deje una trazabilidad clara en tus registros.
Este es uno de los errores más frecuentes.
Las facturas rectificativas deben llevar su propia numeración y serie, independiente del resto de facturas.
No vale con “sumar una más” dentro de la serie general.
Por ejemplo, puedes crear una serie específica como R-001, R-002, R-003… para diferenciar claramente tus rectificativas.
Así, si Hacienda revisa tus libros, podrá ver de inmediato qué facturas fueron corregidas y por qué.
Cuando corriges una factura, también se ajustan automáticamente los impuestos asociados.
Si habías declarado un importe mayor o menor del real, la factura rectificativa servirá para ajustar el IVA repercutido o soportado en el trimestre correspondiente.
En otras palabras: si cobraste o declaraste de más, podrás compensarlo.
Y si lo hiciste de menos, evitarás sanciones por errores involuntarios.
La tentación de “eliminar y volver a hacer” una factura es habitual, pero peligroso.
Hacienda valora la trazabilidad: quiere ver qué se corrigió, cuándo y por qué.
Emitir una factura rectificativa es la forma profesional, segura y legal de hacerlo.
Además, te ahorra explicaciones en caso de revisión o inspección.
Equivocarse al facturar es humano. Lo importante es saber corregir sin romper el orden contable.
La factura rectificativa es la herramienta que mantiene tus cuentas limpias, tus impuestos en regla y tu tranquilidad intacta.
En Facturavia puedes emitir tus facturas rectificativas de forma rápida y sencilla, sin perder tiempo ni cometer errores. El sistema se encarga de que todo quede ordenado y conforme a la normativa, para que tú solo tengas que corregir y seguir trabajando con tranquilidad.